Adriana Álvarez ha participado en procesos de formación para implementar La Aldea como estrategia en el regreso a clases y el modelo de alternancia. Tras haber implementado la herramienta en su clase, nos cuenta su testimonio.
Una vacuna contra el Covid-19, una abeja custodiando un corazón, una jeringa, un mensaje de apoyo a la ciencia… Estos fueron algunos de los dibujos y mensajes creados por los estudiantes de 7° de la profesora Adriana Álvarez, una docente de Inglés que enseña en La Institución Educativa Municipal Artemio Mendoza Carvajal, ubicada en la ciudad de San Juan de Pasto, en el departamento de Nariño.
La profesora decidió utilizar La Aldea: Historias para un mundo en transición con el fin de motivar a sus estudiantes con la materia y abordar temas como la salud, el autocuidado y la protección de la vida. “Le he sacado mucho provecho a La Aldea en el área de inglés porque he podido transversalizar contenidos y atraer la atención de mis estudiantes para hablar de temas que responden a la actualidad”, comenta Adriana.
Según la docente, la estrategia de La Aldea ha resultado útil pues le ha permitido potenciar el aprendizaje de la lengua extranjera a través de temáticas y actividades novedosas que han sorprendido a sus estudiantes. Seguir los protocolos de bioseguridad, garantizar el bienestar de la comunidad educativa y pensar en los demás, son solo algunas de las reflexiones que esta profesora ha llevado a su aula. Para ella y su área, la estrategia ha resultado muy práctica, pero Adriana también considera que esta podría implementarse en cualquier otra asignatura.
La Aldea es una herramienta que acoge a todos. Entonces, es posible trabajar matemática, ciencias sociales, inglés (…). Y lo mejor: nos facilita desarrollar proyectos lindísimos y académicos que permiten a los estudiantes construir ideas, no solo por una nota, sino porque aprender y compartir en realidad vale la pena.
“A través de esta estrategia pedagógica, busco que mis estudiantes vean a su alrededor y reconozcan todos los esfuerzos que se han hecho por mejorar las instalaciones de la institución y brindarles elementos que ellos pueden utilizar para cuidarse y cuidar a sus familias en el regreso a la presencialidad”, señala la docente. De estas reflexiones, lo que más ha podido analizar junto a los personajes de La Aldea y sus estudiantes, es que proteger la vida es mucho más que una norma; se trata de desarrollar una consciencia que permita pensar que si yo me cuido, entonces cuido a los demás.